mayo 20, 2010

Pisar tu calle



A Ceci Garate;
mal y tarde

Me tendrías que ver; hace tiempo estoy de vuelta.

De vuelta a la vida, de vuelta a la ciudad. Esta ciudad donde la última vez me perdí, la ciudad de la que tuve que huir para escaparme de mi propia sombra…

La ciudad ha cambiado: calles nuevas, flores nuevas, semáforos nuevos, nuevos anuncios. Pero tu casa no se ha movido de ahí.

Otra vez aquí,
otra vez tu nombre,
tu recuerdo, otra vez.

Fue un parpadeo al ir manejando. Por dar la vuelta unas cuadras después; repentinamente me encontré pisando tu calle.

Esa calle donde estacionaba mi coche:

Para ir a buscarte;
para ir a la heladería a leer Mafalda;
para ir a los Castillos;
para llegar de madrugada;
para esperarte;
para ver salir la moto de tu hermano;
para atrevernos a hablar;
para contar patrullas;

Esa calle donde un día, al subir al auto, sonaba “Contigo Aprendí” y preguntaste ¿Quién canta?

Calamaro -me limite a contestar sin notar lo que la canción y el momento me querían decir-

Hoy entiendo que lo que tenía que aprender contigo nunca lo aprendí. Mal y tarde, en todo caso.

Hoy, sin embargo, a unos pasos de tu calle sonó en el carro una canción que me vino a llenar de vergüenza y arrepentimiento. Dos sentimientos absurdos que de nada sirven, pero que me ponen a escribir la disculpa que nunca pediste, que nunca te di, pero que mereces de sobra.

¿Por qué?

Porque peor es nunca hacerlo…


Confidencias de amor
Genaro Lambida

“Yo ya te iba a querer; pero me arrepentí
la luna me miró y yo la comprendí
Me dijo que tu amor no me iba a hacer feliz
que me ibas a olvidar porque tú eras así…”



Es que yo estaba muy distraído, muy fuera de mi, con muchas ganas de correr y al tomar velocidad solté tu mano.

Perdona el silencio, las palabras, mi ausencia, mi presencia inoportuna.

Acepta mis disculpas como los amigos que nunca fuimos…

La idea era darte una bufanda que te protegiera del frío y me salió un cubo de hielo.

Es muy tonto decirlo, pero así fue: nunca tuve intención de lastimarte.

El camino nos ha puesto en nuestro lugar y eso es inevitable.

El tiempo es el autor que escribe siempre los mejores finales…

Que allá donde vayas la dicha y la felicidad estén contigo.


GBo

2 comentarios:

  1. vaya que madurez en tu sentir!

    pedir perdon siempre ha sido de sabios...
    reconocer nuestros errores maas!

    pero el mas verdadero "amor" se encuentra en saber decir que " te amo y que seas feliz aunque no sea conmigo"...

    uf nos es facil decirlo verdad?...
    pero son cosas que siempre nos hacen trascender!

    un saludito!

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  2. ¿Madurez en mi sentir?

    No creo que la chica de la dedicatoria opine lo mismo, ja ja ja…

    Cómo sea lectora fiel,

    La idea es ir cerrando la cuenta con el pasado, para viajar más ligeros

    Cuesta decirlo -y mucho-, pero peor será no decirlo

    Y tú sabes que no se me quedar callado

    Por cierto

    ¿Vendrás al concierto conmigo?

    GBo

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